Jeromos y Gonzalos

Descripción

Dos temporalidades diferentes y muy distantes se convocan y colisionan en Jeromos y Gonzalos. El Cordobazo. Una de ellas remite al pasado colonial, al siglo XVI, y la otra se inscribe en el presente de la narración, que coincide con la movilización obrera que enfrentó a la dictadura de Onganía en 1969. La ciudad de Córdoba se constituye en el escenario donde convergen esos tiempos dispares y se representan dramas personales y colectivos, atravesados centralmente por la violencia como si se tratara ésta de una constante insoslayable de la historia política y cultural de los argentinos.

Si bien este texto pertenece a la literatura y en especial al amplio y heterogéneo conjunto integrado por novelas, como sucede en toda la obra de Joaquín Bustamante la historia y la ficción se mixturan para sostener una memoria íntima y pública a la vez de las identidades locales y nacionales, de sus encuentros y discrepancias.

Además del relato que conjuga sin solución de continuidad pasado y presente, en Jeromos y Gonzalos. El Cordobazo sobresale la narración episódica y discontinua junto el estilo inconfundible del autor: el registro pormenorizado del vívido movimiento de la conversación que hace de sus personajes hablantes en cuyas voces resuenan el recoleto bullir de sus experiencias y los estruendos más sonoros de un tiempo que los envuelve y determina.